¿Cómo generas tu respuesta emocional en los estados de estrés y agobio?
Primero, el estrés es necesario para el desarrollo de nuestra existencia y segundo, un nivel soportable es adecuado. Dicho esto, el estrés es una respuesta adaptativa del sistema al entorno, emociones y aprendizaje que hemos vivido.
He observado en estos años, que la salud emocional es nuestro eslabón perdido.
Nuestro cerebro está especializado en localizar información que nos amenace, desafíos de cualquier tipo. Funciona mejor, es decir, está más activo y atento ante cierto estrés, pero esta situación no ha de cronificarse.
El estado de alarma genera en el cerebro una serie de señales que viajan hasta las glándulas adrenales, las cuales comienzan a liberar grandes cantidades de cortisol, nuestro alterador.
Ni la presión por falta de tiempo, ni el exceso de trabajo. El estado de estrés se activa ante cualquier amenaza, al cerebro le importa poco de donde venga la amenaza, pues la respuesta al estrés es siempre la misma. Al cerebro le da igual que sea real o sólo un pensamiento estresante, el cerebro si se lo ha creído, sea real o ficticio dispara su respuesta: huida o enfrentamiento.
No hay que temer al estrés, es parte de nuestra supervivencia, simplemente usar los métodos de trabajo más eficaces.
Las inseguridades, las quejas emocionales, los conflictos, miedos, ansiedades y alteraciones psicosomáticas que constituyen una parte importante de los problemas que veo en la clínica diaria, se transforman en nuevas formas de entender, que se ajusten mejor a nuestra vida.
Una manera de manejarlo es quitar la importancia personal a las acciones o situaciones que te ocurren. Enfócate.
Clarificar la mente, usar el pensamiento como un receptor de ondas de información, dejar de usarlo como un emisor de tensión.
Deja la forma, gestiona el contenido, nueva versión tan ventajosa como sea posible. La habilidad de generar un pensamiento eficaz. Deshazte de las creencias que te limitan.
La transformación nos posibilita darnos cuenta de lo que necesitamos, al igual que un maestro no es quien nos transmite y enseña de buena manera, sino quien nos inspira para ser más eficaces en el conocimiento de lo que llevamos dentro.
DEJA DE TOMARTE LA VIDA TAN EN SERIO…hazla divertida y creativa, encuentra una estrategia y avanza que no hay tiempo que perder.