Las gotas de Flügge, son las gotitas respiratorias que salen volando de la boca o de la nariz, de saliva o de moco líquido, implicadas en la transmisión de infecciones.
Las gotitas de Flügge son partículas diminutas expelidas al hablar, toser, estornudar, respirar, que pueden transportar gérmenes infecciosos de un individuo a otro. Estas partículas miden de 0.5 a 10 μm, y pueden permanecer hasta 30 minutos en el aire en suspensión, lo cual les permite ingresar hasta las vías respiratorias.
Las gotitas de Flügge fueron descritas en la década de 1890 por el bacteriólogo e higienista alemán Carl Georg Friedrich Wilhelm Flügge (1847-1923), quien demostró que incluso durante el “discurso tranquilo” se rocían gotitas en el aire en minutos; este hallazgo fue fundamental para el uso quirúrgico de máscaras de gasa y las normas de aislamiento.
Carl Flügge era conocido por defender la higiene como una disciplina médica. Hizo investigaciones sobre la tuberculosis y las partículas diminutas expelidas al hablar, toser o estornudar que pueden transportar gérmenes infecciosos de un individuo a otro.
En la tuberculosis se le llama unidad bacilar a una gota de Flügge que contiene de uno a tres bacilos tuberculosos.
Si cogemos como ejemplo los coronavirus, que son virus del resfriado común y otras infecciones respiratorias. Estos virus mutan muy rápido y se adoptan a los huéspedes por contacto cercano.
Los infectólogos nos dicen, que las gotas de Flügge transmiten a cierta distancia. Algunos virus se alojan en las gotas finas, otros en las gotas más grandes, desde dónde alcanzan y se depositan sobre los lugares donde hay personas infectadas, por eso se aconseja lavarse las manos,pues son las manos la principal fuente de contacto con las superficies.
Si estamos atentos y cogemos consciencia de la situación sanitaria, mantenemos un sistema inmune fuerte y nos unimos en vez de separarnos